VIERNES 25 JUNIO | 16.ooh. En la Calle del Sol.
El raku (樂) es una técnica tradicional oriental de elaboración de cerámica utilitaria. Se cree que es originaria de Corea, sin embargo es en Japón donde ha florecido y encantado a todos los que tienen contacto con ella. Desde finales del siglo XVI el rakú atrajo a los maestros del té, influidos por la filosofía budista zen, quienes sintieron un placer singular en este retorno consciente al directo y primitivo tratamiento de la arcilla. Durante la ceremonia del té los participantes bebían la infusión en vasijas fabricadas por ellos mismos. El kanji (ideograma, equivalente a palabra) raku significa tranquilidad, pero también “diversión” o “felicidad”.
Proceso del Raku
El Raku es, pues, una compleja alquimia donde intervienen los cuatro elementos (tierra, fuego, agua y aire) de la cual resultan piezas únicas, siempre maravillosas.
Como no es nada extraño que en el proceso, siempre manual, se rompa alguna pieza, por sus tensiones internas al colocarlo al calor, o al cambiar de temperatura, el ceramista de Rakú no se aflije por esto, sino recoge la pieza con cuidado y repara la pieza hasta ponerla en condición de utilizarse con sus cicatrices a la vista. Los alfareros antiguos del Japón resaltaban estas cicatrices al soldar con metales preciosos la pieza y en muchos casos le daban más valor a una obra así obtenida.
Podéis ver fotos de piezas pinchando aquí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario