
Después de muchos años y unos cuantos kilos, nos volvió a acompañar el cantautor
Javier Bergia. Es como ese viejo amigo que hace mucho tiempo que no ves y decide hacerte una visita rápida para ver qué tal estás y contarte algunas historias. Eso es lo que hizo el domingo, cogió su guitarra y se puso a cantar y contar historias como se cuentan cuando estás con unos amigos tomando unas copas, con mucho cachondeo. Entre historias e historias, risas y risas nos cantó algunos temitas de su último disco que es una recopilación revisada de su obra como cantautor titulada "Antología". Estuvo acompañado haciendo las voces y tocando algunos instrumentos muy artesanales por Cristina y al final a la guitarra por Mikel. Después de dos horas y media se despidió este hombre enorme, afable y tierno de todos los amigos que estábamos allí, digo amigos porque a partir de esas horas en el Rubicón será para todos "el bueno de Bergia". Hasta pronto amigo.
Para ver algunas fotos de la noche pinchad
aquí.